Albergue Parroquial: «Desde el ministerio que conduce Land no hicieron nada para evitar que esta gente quede en la calle»

La falta de aportes comprometidos por el Ministerio de Desarrollo Social de la provincia motivaron la medida. Por esto las personas que necesitan de una inmediata contención quedan en mayor estado de vulnerabilidad. El padre Luis García denunció que el ministro Nicolas Land no los recibe ni los recbió desde su asunción.

Por REDACCIÓN

El padre Luis García, párroco de la Catedral de Viedma habló con este medio tras confirmarse el cierre del albergue acondicionado para 15 personas que no cuentan con otra opción que dormir en la calle. Asegura el padre Luís que, «el cierre fue una desicion muy difícil, se da por el incumplimiento del Minisiterio de Desarrollo Social de la provincia. Es la realidad desde allí no hicieron nada por estas personas desamparadas».

Explico Garcia que sin los depósitos comprometidos por el Ministerio de Desarrollo Social, no hubo mas que cerrar las puertas del albergue ubicado al lado de la catedral de Viedma donde se ofrecía estadía para personas en situación de calle.

Ante esta situación, unas diez personas amanecieron este miercoles envueltos en frazadas, y durmiendo en el piso del ingreso a la catedral y otro grupo en la plaza Alsina, frente al lugar.

«Esta personas así pasaron la noche, a diferencia de otras que tuvieron una cama, una ducha caliente y un plato con comida. Hizo mucho frío y a nadie le importo. Hay un ministerio social de la provincia y esta en esta ciudad y lejos de preocurase, simplemente no hicieron nada», dijo el padre Luís, en conversacion con el programa Primera Mañana de Austral Radio.

Para visibilizar la situación incluso estando a doscientos metros del Ministerio que conduce Nicolas Land -el máximo refernte del area social y el responsable principal de contener las dificultades sociales- es que estas personas permanecieron todo el día en la plaza Alsina, frente a la Iglesia.

El hogar Zatti, la misma suerte

La casa hogar Don Zatti hace casi 20 años que cumple con una función fundamental dedicada a ofrecer comida y techo a pacientes y familiares que por razones de salud son derivados desde el interior de la provincia al hospital de cabecera ubicado en esta capital. Por allí pasan personas que no cuentan con obra social ni recursos económicos. Muchoas viven allí procesos postoperatorios, tratamientos oncológicos y de otras patologías que no tienen respuestas en nosocomios de otras localidades. En diciembre de 2016 inauguraron sus nuevas instalaciones e la calle 7 de Marzo a pocos pasos del hospital regional Artemidez Zatti.